Embriones muertos,
creación de orfebres resguardan
nidos callados
donde la paloma golpea el silencio
que ya le había robado el sueño.
Copas llenas de trozos de azúcar
forman hilos de colores,
dulces cristales apiñados
caen sobre el torpe aleteo
y le esparce como cálido hielo.
Silencio
que lleva a cuestas risas malformadas,
ojos empañados que cedieron.
[La tetera no contiene té,
solo un fondo de hojas secas
e inciertos acumulados.
¡Cuidado, tiene tapa y se ha cuarteado!
Llueve,
mientras en agua hierve
y se filtra reviviendo los olores.]
Espero anegada de noche,
nunca por la madrugada.
Guardas silencio cuando el útero ríe,
cuando la sangre no transita en su centro
Errática,
la paloma con dulce aleteo
esparce lágrimas derretidas en oscuras velas,
mientras queda la copa
y el vino
…en codos le espera