Vaso que se llena de flores muertas o simplemente vanidad
Odio las rosas rojas
-Hasta que la última espina del tallo se encarne en la palma de mi mano
y el púrpura de sus pétalos se confundan con mi sangre,
y transite con la tuya fluyendo ambas en cascada;
hasta entonces,
desgranada y vacía,
te odiaré tanto como odio las rosas rojas.