No acataré los designios del olvido
que insiste en borrar mi nombre
ni abandonaré las filas de tu corazón.
Caminaré con mi uniforma raído
de tantas derrotas
y no esconderé los días que atraviesa
mi vida.
Deambularé por los bares
por los últimos escaños del verano
y tu distancia dejará de existir.
– Eres demasiado amor para el
olvido definitivo –