Tal como lo cuento…
Apenas se asomaba el sol, mis sueños no acababan aún de contar a mi inconciente los secretos del alma, los somníferos no terminaban de hacer efecto y la vejiga comenzaba a molestar (no tanto como para ir corriendo al baño…
Apenas se asomaba el sol, mis sueños no acababan aún de contar a mi inconciente los secretos del alma, los somníferos no terminaban de hacer efecto y la vejiga comenzaba a molestar (no tanto como para ir corriendo al baño…
Contracciones de amor van y vienen de ti por dentro y por fuera de repente los latidos se aceleran empiezo a sentir que es algo especial la bolsa parece papel celofán se rompe a la vez que veo escapar el…
Me llenaste ojos y manos, escalé las paredes del aire que te contenían, y la brevedad dejó de latir para ser historia. No hubo cielo para alcanzar porque todo el cielo se hacía lluvia desde la voz que tus dedos…
Estás aquí tan cerca, donde acaban mis pies descalzos, donde apenas siento mi piel. Vengo a entregar los libros prestados, las horas abandonadas, las palabras sin significado anotadas a pie de página. A mostrarme de rodillas ante los infieles. Como…
(Lola, donde quiera que estés, se te extraña mucho en este espacio donde tu poesía era agua fresca de un cántaro recién hallado) Soledad derrama su nombre sobre las cuencas vacías que forman círculos en tu íntimo paisaje. Soledad no…
Un cuento de hadas Si las hadas se perfumasen, lo harían con sombras de azúcar en la sutil mezcla del agua del mar. Se envolverían en las últimas luces de otoño y en el abrazo que recorre vírgenes y desnudas…
Se instalaron los infames augurios sobre pétalos rosados cuando me venció la oscuridad. Intenté volver retroceder como tulipán fracturado. Nuevamente amaneció Y el deseo huyó con el rocío Pero tu no perdonas los rumores invadidos de discordia.
Reflexión. Ni suplico al aire para mi pecho, ni dejo que la helada roja se detenga en mi cuerpo; ni siquiera empujo al viento. Lamento. Pero, mis párpados jamás se ahogaron con la tempestad de dentro. Esperanza. El eco pasa,…
Mi alma y mi savia reflejan al ser humano pensante y hoy pensativo que ya no antevé el futuro sino que se deja tocar por el infinito. Escalofríos desconcertantes invaden en éxtasis la hermandad de mis células. Sin noticiarios…sin alarmas…
Vivo tras una malla de púas que florecen tan sólo por fuera, pétalos de mandarinas desgajadas con aroma de azahares. Alambres lloran mi sangre en decapitada certeza. Médula marchita sin magia, hechicería grabada en la piedra, con las manecillas ausentes,…
Nada, aún cuando intento cada vez que nos amamos remover todas las células de mi cuerpo. Fundirlas en su piel hasta formar de nuevo ese ser, ese con el que soñé despierta tantas noches; tantas, que no soy capaz de…
Fui virgen alguna vez. Cuando ser virgen no significaba tocarse el sexo con los bordes del colchón a tientas. Era inventar para mis muñecas vestidos de novia, pegar lunas vacías en las heridas paredes que me guardaban y poco después…